La Anónima apuesta por ULMA Packaging para el envasado al vacío de carne con sistema Flow-Vac®
La Anónima, con más de un siglo de actividad ininterrumpida, es una de las principales cadenas de supermercados de la Patagonia argentina y del centro del interior del país, posicionándose como la cuarta empresa del sector en el ámbito nacional y la segunda de bandera argentina. Cuenta con más de 150 tiendas, que abastece desde sus dos frigoríficos propios, el Frigorífico La Anónima, ubicado en la ciudad de Salto, Buenos Aires (Argentina), y el Frigorífico Pampa Natural, ubicado en Speluzzi, La Pampa (Argentina). Ambas plantas procesan aproximadamente 20.000 cabezas de ganado Angus por mes.
El reto principal para ULMA Packaging a la hora de abordar esta instalación fue mejorar la eficiencia de producción de un método de trabajo tradicional en Sudamérica como es el embolsado manual de los cortes de carne, y lograr así una mejor productividad. Fue todo un desafío, puesto que era necesario rediseñar el Lay Out en un espacio muy reducido y además, hacerlo en poco tiempo, dado que fue preciso poner en marcha la instalación en tiempos muy reducidos de parada del frigorífico, en épocas de vacaciones de verano. Además, se trataba de un importante salto en el proceso, pasando de un envasado tradicional a un envasado automático, sobre un producto muy húmedo, donde un error de fugas de vacío podía afectar a muchas toneladas de carne. La necesidad del cliente al automatizar los procesos era mejorar el rendimiento en toneladas y la reducción de mano de obra que no aporta valor añadido a su proceso. El crecimiento de La Anónima es progresivo en los últimos años; en los últimos tres años pasó de cerca de 1.800 toneladas adjudicadas a la cuota Hilton - un cupo de exportación de carne vacuna sin hueso de alta calidad y valor, que la Unión Europea otorga a países productores y exportadores- a las actuales 2.300 toneladas, y la nueva instalación debía adecuarse a las necesidades de un cliente de alta exigencia tanto en volumen como en plazos y calidad.
A principios de 2018 se instalaron en el Frigorífico La Anónima en Buenos Aires dos líneas que constan de una FV 35 y una FV 55 ambas con carga automática a campanas de vacío VS95 de Sealed Air. El proyecto fue definido por el departamento técnico de ULMA Packaging para el envasado de cortes vacunos, destinados al mercado interno y al mercado externo (CEE, China, Rusia, Brasil).
En una primera etapa, se definieron estas dos primeras líneas y a raíz del éxito al acometer el proyecto se definió en el último trimestre de 2018 la tercera línea, compuesta de una segunda FV 55 con carga automática a campanas de vacío.
La instalación cuenta con una Despostada dividida en dos plantas, en la planta superior se encuentra el desposte de cuartos traseros y delanteros, la sala de cortes y el empaque primario, que según el tamaño de los cortes se divide en las dos líneas de Flow-vac® FV 35 y FV 55, ambas con carga automática a campana VS95 con sus respectivos túneles de termocontracción.
Por otro lado hay una línea independiente de recortes que abastece a una TMS de Marel gestionando el recorte de carne según su tenor graso. En la segunda planta se encuentra el empaque secundario, contando con un carrousel de cortes para nivelar el trabajo de los operarios, detectores de metales y equipos para manipular cajas. La capacidad de producción es de 3000 cuartos en dos turnos de 9 horas, alcanzando la cifra de 90 toneladas de cortes envasados al vacío por las dos líneas de Flow-vac® de ULMA y 40 toneladas de recorte de carne que entrega la TMS de Marel, sumando un total de 130 toneladas al día.
TMS MAREL (Trimming Management System / Sistema de gestión de recorte de carne) |
Primario |
Flow-vac® FV 35 |
Flow-vac® FV 55 |
2 posicionadores |
2 VS 95 Cryovac |
2 túneles de termocontracción por agua |
Secundario |
Carrousel de cortes |
Detector de metales |
Manipuladores de cajas |
ULMA Packaging aporto en este exigente proyecto su experiencia de más 18 años en el mercado mundial con la instalación de Flow-vac®, logrando convertir una instalación de envasado tradicional a un planta de envasado automático, lo que ha sido clave para la mejora de la higiene del proceso, y ha representado un salto cualitativo en la presentación del producto al unificar los tamaños de bolsas, reduciendo los stocks y disminuyendo el consumo de plástico.
El resultado del proyecto se puede calificar como excelente, ya que se cumplieron todos los objetivos propuestos, mejorando la presentacion para algunos mercados como el chino, muy exigente en cuanto al envasado. La satisfacción del cliente con esta instalación suma un nuevo éxito a la larga lista de proyectos de automatización abordados por ULMA Packaging.